Su gloria cubre los cielos, y los cielos de los cielos. Mi mente finita no alcanza a imaginar lo vasto del universo. Con todo y eso, Dios lo llena todo.
Dios no puede ser encerrado en 4 paredes. Dios no se identifica con un aviso denominacional.
Ahora, Dios habita y se mueve en medio de su Iglesia. Su Iglesia es una sola. Pero no es aquella que se denomina "Iglesia Madre"; no, no es aquella iglesia religiosa llena de obras muertas y rituales humanos.
Tampoco es la Iglesia que vive ufanándose de "tener la verdad"; no, no es aquella que pretende hacer a Dios un Dios local, con unas siglas y un logo exclusivo en sus hombros. Dios no tiene paredes ni letreros que lo condicionen a Él, mas bien la gente vive condicionada en su fe, pero el día que amplíen su fe, verán a Dios en toda su gloria moviéndose en su congregación.
La Iglesia no puede tener paredes que las separen, ni siquiera del mundo. Sé que cualquiera se escandalizará con lo que digo, porque pensará: -Dios no nos ha llamado a contaminarnos con los de afuera. Pues bien, el espiritual sabe que no es afectado por el mundo: ÉL AFECTA AL MUNDO!
En la ley, el escogido no podía tocar lo inmundo para no contaminarse.
En la gracia, todo lo que el escogido toca se santifica.
¿Eres de los que no le das la mano ni siquiera a ese ser querido por no querer contaminarte? Mi amigo, vives en la ley.
La gracia nos da el poder de extender la mano al pecador, y el pecador es afectado por la presencia de Jesús que llevamos dentro.
Dios no tiene paredes.
Dios no se identifica con un letrero.
La Iglesia es una sola. Cuál? la que no comparte con otras denominaciones porque sus estructuras y la manera de hacer culto no simpatiza con ella? NO!
La que se ufana de vestirse con medidas largas? NO!
La que cree que Dios solo se mueve en su organización? NO!
La que piensa que su doctrina y la forma de trabajar es la mejor? NO!
La que insiste que solo ellos tienen derecho a la entrada del Reino? NO!
La que considera como debe ser la mejor manera de predicar desde un púlpito? NO!
La que más congrega ovejas en el Redil del Buen Pastor? NO!
La que más prospera y se mueve en los medios masivos? NO!
La Iglesia verdadera, es la que lleva un Dios infinito en el corazón.
La que tiene a Cristo por cabeza y al Espíritu Santo por Guía y Vicario del Señor.
La que mantiene una relación directa con Dios todos los días, 24 horas, en cada pensamiento, dicho o actitud.
La que procura vivir en santidad para Dios, como lo instruye su Palabra.
La que sabe que la mejor santidad nace del corazón y se exterioriza.
La que reconoce su pobreza de espíritu para ser enriquecidos por el poder de Dios diariamente.
La que no depende de una edificación porque la Iglesia misma es la edificación, el Tabernáculo de Dios.
La que vive feliz, dichosa, sin prejuicios, sin rencores, sin apariencias y sin hipocresía, porque ama de verdad, sirve por amor, sabe perdonar y se siente satisfecha en su Señor.
Sé parte de la Iglesia verdadera. De aquellos que mueven a Dios por medio de su fe y viven para Él en todo momento, porque saben que su salvación y la herencia del Reino depende de su gracia y su amor infinitos.
Deja a un lado el denominacionalismo,
abandona los prejuicios sociales con tus hermanos en la fe que no son de tu congregación,
gózate cuando sepas que una congregación prospera con almas nuevas que se unen al cielo,
no te apresures de tildar de apóstata o hereje a un predicador sin antes haberle oído,
evita criticar a un hermano en la fe solo por rumores: debes primero conocer como predica y como vive lo que predica,
y por último,
No limites jamás a Dios...déjalo que se mueva!
Muévelo por medio de tu fe...Él quiere sanar, Él quiere libertar, y sobretodo, Él quiere Salvar.
SIN PAREDES...SIN LETREROS.
Citas bíblicas de apoyo: Habacuc 3.3-4; 1 Crónicas 2.6; Colosenses 1.18; 1 Corintios 10.32; 1 Corintios 6.4; Efesios 5.26-27; Romanos 14.1-3.
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